En el mes de noviembre, los autónomos tendrán que abonar los impuestos y cotizaciones que aplazaron como consecuencia de la declaración del estado de alarma por la pandemia.

La Agencia Tributaria dio la posibilidad en el mes mayo de realizar un aplazamiento de las declaraciones de IVA e IRPF del primer trimestre y pagar estos impuestos, seis meses después, es decir, hasta el 20 de noviembre.

Si no solicitaron la carta de pago y cancelaron sus impuestos pendientes de forma parcial o total antes de que pasasen los cuatro primeros meses, el próximo 20 de noviembre, la Agencia Tributaria cargará en su cuenta el importe total de la deuda aplazada. Según explicaron desde la Administración, «el interés de demora es del 3,75% y gira sobre los días que pasan entre el fin del periodo voluntario (20 de mayo) y el momento del vencimiento, dependiendo de cuándo pague, si en el quinto o sexto mes».

Por lo tanto, el pasado 20 de septiembre se cumplió el plazo disponible para devolver de forma voluntaria y sin intereses los impuestos aplazados el pasado mes de mayo. Esto significa que todos aquellos que no solicitaron la carta de pago y saldaron todas sus deudas, aún están en plazo, pudiendo devolver la deuda sin sanción, pero van a tener que hacer frente a intereses del 3,75%.

También deberán tener en cuenta que a su cuota de autónomos habitual a la Seguridad Social  se le sumará la devolución de las cotizaciones aplazadas, por lo que si solicitó la moratoria en mayo, tendrá que pagarla en noviembre; si la solicitó en junio, deberá pagarla en diciembre; y si la solicitó en julio, en enero de 2021.

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